TARDE DE SILENCIOS CON DOS AVISOS PARA MORENITO DE ARANDA.
El primero pesó cerca de 600 kilos. Un pavo en toda regla. Hondo y serio, golpeó con violencia las tablas a su paso desde la salida. Juan Bautista lo paró con soltura. Sangró mucho el toro en el peto de Puchano, duro el segundo puyazo. Del tropezado quite de El Cid se salvó la torera media por el derecho. El toro fue recortando el recorrido en la muleta. Bautista trató de empujarlo hacia delante. Los toques, quizá demasiado violentos, descompusieron al sosote santacoloma. La estocada cayó baja.
Manseó el cuarto de La Quinta aunque empujó después en el peto de Alberto Sandoval. Antes había humillado en el suave capote de Juan Bautista, que lo paró con mucha facilidad. En la muleta la perfección técnica de Bautista tapó la condición del toro, que se lo pensó en el embroque más de una vez. Terminó soseando, sacando la cara por encima del palillo, pero con fondo de nobleza y, sobre todo, temple. Bautista, aseado y limpio en todo momento, dejó una gran estocada. Un punto trasera quizá pero de efecto inmediato.
El berrendo en cárdeno que hizo segundo apuntó poca humillación de salida pero se desplazó con nobleza. Pasó desapercibido en los primeros tercios, Curro Robles cruzó el anillo llevándoselo a punta de capote hasta el burladero de matadores con mucho temple. El Cid brindó a la parroquia. Tres tandas sobre la mano derecha ilusionaron a los tendidos que entraron especialmente en los cadentes pases de pecho. Al echarse la muleta a la mano izquierda se le vino recto hasta el punto de perder el engaño. Continuó por la derecha pero ya no alcanzó la emoción anterior. El toro se había aburrido, venía dormido, sin humillar. Lo pasaportó de estocada y varios descabellos.
Un tío cinqueño fue el quinto, el único toro negro del sexteto. Abierto de cara, corniveleto. Ya de salida recortó el viaje por lo que El Cid decidió pararlo sobre las piernas sacándoselo hasta los medios. En la brega estuvo muy acertado El Lipi. En la muleta fue una prenda. El Cid estuvo solvente, se puso por los dos pitones e incluso pasó apuros en una violenta colada. La estocada quedó atravesada
Arrebatado fue el saludo de Morenito de Aranda con el capote. Lleno de expresión, ganando terreno, enganchando adelante. Las personales verónicas del burgalés fueron como un calambre que espabiló a la afición. Las medias del remate tuvieron la misma entrega que el resto del saludo. Picó trasero Héctor Piña. El quite de Juan Bautista fue abrochado con una larga cordobesa lentísima. El inicio de muleta tuvo torería. Después se aplomó el toro. Morenito buscó la colocación, pero el buen toro de La Quinta ya lo había dado todo. No aguantó la lidia. El descabello se le trastabilló a Morenito.
Madrid, miércoles 9 de mayo de 2018. Feria de San Isidro. Toros de La Quinta. Juan Bautista, silencio y saludos; El Cid, silencio en ambosMorenito de Aranda, silencio. Entrada: Tres cuartos de plaza. Saludó en el sexto José Manuel Zamorano.